Porque tú, más que nadie, has hecho aportaciones inigualables para el mundo en general y Occidente en particular. Los musulmanes, cuyas supuestas aportaciones no dejan de restregarnos por la cara, no han hecho nada si se los compara contigo.
Porque tú nos diste nuestra cultura, y no sólo eso, sino que ahora, en estos momentos de degeneración, la vas a salvar. Dado que vivimos en el Siglo XXI, no puedo evitar decir: ¡GRACIAS, AMANECER DORADO!
ΕΥΧΑΡΙΣΤΩ, ΧΡΥΣΗ ΑΥΓΗ!
ΕΥΧΑΡΙΣΤΩ, ΕΛΛΑΔΑ!